Saúl “Canelo” Álvarez volvió a escribir su nombre en la historia del boxeo tras un vibrante combate de doce asaltos en Riad, Arabia Saudita.
El mexicano se impuso por decisión unánime a William Scull, consolidando su reinado como campeón indiscutido de los supermedianos en la ANB Arena.
El duelo comenzó con intensidad, ambos púgiles dispuestos a conquistar el codiciado título.
Desde los primeros tres rounds, Álvarez tomó la delantera, conectando golpes precisos al cuerpo de Scull, quien perdió movilidad y se convirtió en un objetivo claro para el tapatío.
Aunque el cubano respondió en el cuarto asalto, aprovechando la distancia para intercambiar golpes potentes, fue en el quinto donde el castigo de “Canelo” marcó la pauta.
Scull encontró un segundo aire en el séptimo round, el mejor para él, al impactar repetidamente a un Álvarez visiblemente frustrado.
Sin embargo, el mexicano ajustó su estrategia y, para el décimo asalto, recuperó el control, descargando una ráfaga de golpes al rostro del cubano, quien comenzó a evadir el combate.
En el round final, “Canelo” persiguió sin tregua a un Scull defensivo, asegurando una victoria contundente que reafirmó su legado ante millones de espectadores.